Pelota basquet







Manuel tenía 5 años cuando comenzó con toda su ilusión a jugar al baloncesto en el BAM. Ya apuntaba maneras. Cada día de entreno iba con su larga camisa y esos azules pantaloncitos cortos, con los que apenas le asomaban las piernas. Pasaron los años, ese niño se fue fortaleciendo, fue madurando y poco a poco, aquel niño inocente pasó de la infancia a la adolescencia. Siempre con una cosa en común, seguía jugando al baloncesto con la misma intensidad, ilusión e integridad con la que empezó. "El basquet es mi pasión" decía. Hoy tiene un partido importante con la NBA, pero no es su mejor día, están a dos puntos de ganar, a dos segundos del final del partido, Manuel se posiciona dentro del arco frontal de 6,80 metros del aro, lanza la pelota y suena la bocina, final de partido.